Por Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK._ Docenas de restaurantes, bares, lounges y otros centros de diversión nocturna, con cientos de empleados dominicanos, están siendo afectados desde este jueves, cuando el alcalde de la ciudad de Jersey City en Nueva Jersey, Steve Fulop, decretó el toque de queda desde las 10:00 de la noche, para evitar la aglomeración de gentío en los establecimientos por el coronavirus, según anunció el ejecutivo municipal ayer en conferencia de prensa.
Entre los restaurantes de factura dominicana más conocidos en Jersey City, figuran El Conuco, El Sol del Caribe, Mi Casa, Quisqueya, El Sazón de Las Américas, , El Típico, Boca Chica, La Primicia Mi Tierra y El Patio.
Esos negocios mueven millares de dólares y decenas de empleados y sus familias, dependen de los salarios y propinas que reciben las camareras y camareros durante las noches, especialmente los fines de semana.
Además de los mozos y mozas que sirven a los parroquianos, los establecimientos emplean cocineros, ayudantes de cocina, trabajadores de pisos, encargados de limpieza, managers, deliveries, técnicos, mantenimiento, pero también se afectan a los suplidores de mercancías y productos.
La medida, dicen críticos desafectos con la decisión del alcalde, impactará negativamente la economía, vida nocturna y dinámica de Jersey City, durante la semana que estará en vigencia, dependiendo de la evolución del panorama que se verifica ahora, que incluye aislamientos de parte de varias ciudades, zonas de contención y cuarentenas masivas, entre estas, algunas en Nueva Jersey.
El alcalde advirtió que el toque de queda, incluye a todos los negocios de la ciudad con una licencia de licores vigente y de inmediato, para reducir la cantidad de grandes reuniones por el brote de coronavirus.
Fulop dijo que el toque de queda en bares y restaurantes, promulgado mediante una orden ejecutiva, estará vigente hasta la próxima semana.
«Lógicamente, uno discutiría un ambiente incontrolado como un club nocturno en el que hay 1,000 personas que vienen de noche», dijo el alcalde.
«Entonces, si podemos minimizar la interacción en ese tipo de entorno donde es difícil rastrear a las personas, creemos que es prudente dar estos pasos ahora», agregó Fulop.
La orden ejecutiva también requiere que los establecimientos, como restaurantes y lugares de cultos con una capacidad de 25 o más personas, utilicen una hoja de registro para realizar un seguimiento de todo el que ingrese.
«No sabemos quién entra y sale y no queremos equivocarnos sin precaución», dijo Fulop. «Estamos en un territorio desconocido, así que vamos a ser más agresivos que la mayoría, queremos ser proactivos».
El miércoles, la ciudad canceló su desfile anual del Día de San Patricio programado para este domingo, así como todos los eventos no esenciales patrocinados por la alcaldía en respuesta al creciente número de casos de coronavirus en el estado de Nueva Jersey.
El gobernador Phil Murphy anunció seis nuevos casos este jueves, elevando el total a 29 en el estado con pruebas positivas, incluida una en el oeste de Nueva York. Murphy declaró el estado de emergencia el lunes en medio de crecientes preocupaciones sobre la propagación del virus en Nueva Jersey.
COVID-19, la enfermedad causada por el coronavirus, ha infectado a más de 1.300 personas en Estados Unidos y es responsable de 39 muertes oficialmente reportadas.
La orden ejecutiva también establece que la ciudad cancelará, hasta nuevo aviso, todas las reuniones públicas (Concejo Municipal, Junta de Planificación y otras juntas del Gobierno citadino), eventos apoyados por la ciudad y privados celebrados en locales administrados por el ayuntamiento incluidos los que tienen permisos.
Las oficinas y servicios de la ciudad siguen disponibles, pero los residentes deben llamar con anticipación y programar citas.
El alcalde dijo que antes de ir las oficinas municipales, a los residentes se les harán preguntas de si viajaron fuera de Estados Unidos o si experimentan algún síntoma.
«Si le pedimos al público que tome medidas para tener cuidado, haremos lo mismo y daremos el ejemplo», dijo Fulop.