Dicen conducta curas consterna Iglesia Católica

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Arzobispado de Santiago pide perdón a la sociedad y familiares de los afectados
Arzobispado de Santiago pide perdón a la sociedad y familiares de los afectados

SANTIAGO DE LOS CABALLEROS, RD.-   El semanario Camino, órgano escrito del Arzobispado de esta ciudad, consideró que los hechos de escándalos en que se han visto envueltos sacerdotes dominicanos llenan de consternación a la Iglesia católica, al tiempo que perturban la paz de los más humildes y sencillos.

La reacción del vocero  está consignada en el editorial de su edición correspondiente a este domingo y que, titulado “Que brille la verdad”, circulará en todos los templos católicos nacionales.

Y dice que, ante esa triste realidad se remite a las palabras de monseñor Antonio Camilo, obispo de La Vega, cuando afirma: “Pedimos perdón a las personas afectadas, a sus familias, a la sociedad y al pueblo sencillo, por las veces que con el mal ejemplo y la falta de un testimonio coherente, como servidores de Jesucristo, hemos ofendido”.

Por igual, Camino recuerda lo expresado por el padre chileno Marcos Buvinic M., rector del seminario de Talca, quien dijo que “no se trata de informaciones de las cuales seamos receptores neutrales. Nos involucran emocionalmente y han ido despertando en la mayoría de la Iglesia sentimientos de rabia, pena y vergüenza”.

Indica el rotativo santiaguero que eso no puede hacer desconocer el escándalo ni olvidar que ya el mismo Jesús lo advirtió cuando dijo que “es imposible que no haya escándalos; pero, ¡ay de aquel por quien vienen! Más le vale que le pongan al cuello una piedra de molino y le arrojen al mar, que escandalizar a uno de estos pequeños. Andad, pues, con cuidado”.

“Debemos asumir esta ocasión para purificarnos y dar paso a algo nuevo, a una conversión real y verdadera de los bautizados y como sigue diciendo el padre Buvinic, caminar en la verdad, reconstruyendo confianzas”, precisa.

 Camino aconseja que ese caminar sea humilde, sin posturas defensivas ni excluyendo la verdad asumida y reconocida “dejándose corregir por otros y teniendo como carta de presentación, precisamente, esa verdad dolorosa que nos hace vulnerables y que es asumida buscando caminos de reparación eficaces”.

Al tiempo de pedir que este sea un caminar en la esperanza de poder ofrecer a otros, en la sociedad, el aprendizaje que están haciendo en todo esto, el semanario dice esperar que el Ministerio Público continúe las investigaciones en cada caso denunciado y que prevalezca la verdad, aplicando la Ley “porque nadie debe estar por encima de ella”.

Al final, invita a los cristianos católicos seguir orando en medio de cada tribulación “y digamos como el apóstol Pedro: Señor, ¿a dónde iremos si sólo Tú tienes palabras de vida eterna?”.