Bachelet cierra su campaña y pide ganar ampliamente en primera vuelta

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Quien en 2006 se convirtió en la primera mujer en ocupar la presidencia chilena, encabeza todos los sondeos.
Quien en 2006 se convirtió en la primera mujer en ocupar la presidencia chilena, encabeza todos los sondeos.

CHILE.- La exmandataria socialista Michelle Bachelet cerró la noche de este jueves su campaña electoral, haciendo un llamado a conseguir un amplio triunfo en las elecciones generales de este domingo en Chile que asegure su victoria en primera vuelta.

«Tenemos que ganar ampliamente en primera vuelta», afirmó Bachelet en su discurso de cierre de campaña en el parque Quinta Normal de Santiago, al final de un extenso espectáculo artístico.

«Queremos ganar en primera vuelta, porque tenemos mucho que hacer», agregó Bachelet, describiendo los principales ejes de su programa de reformas, que incluye una reforma a la educación, otra tributaria y una nueva Constitución para termine con la heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).

Médico pediatra, de 62 años, y quien en 2006 se convirtió en la primera mujer en ocupar la presidencia chilena, Bachelet encabeza todos los sondeós, con una intención de votos del 47%. Su más cercana contendora, la derechista Evelyn Matthei, concita una adhesión del 14%.

Las proyecciones indican que, excluyendo votos nulos y blancos, la exmandataria podría imponerse en primera vuelta, para lo cual necesita reunir el 50% + 1 votos.

«Lo que queremos hacer son cambios de verdad, con responsabilidad y gobernabilidad», agregó la exmandataria, sobre su paquete de reformas, que de concretarse, harían a Chile girar nuevamente a la izquierda tras cuatro años de gobierno derechista a mando del empresario Sebastián Piñera.

La reforma tributaria de Bachelet busca recaudar unos 8.000 millones de dólares, con el aumento gradual de los impuestos a las empresas y otras medidas, para destinarlos a educación, donde ha prometido la gratuidad a nivel universitario en un plazo de seis años.

Bachelet ha propuesto, además, una nueva Constitución que acabe con la impuesta en 1980 por la dictadura de Pinochet, que contiene aún una serie de «cerrojos» antidemocráticos, con los que la exmandataria quiere terminar. «Yo no hago promesas, tomo compromisos. No hay recetas mágicas», afirmó Bachelet.