SANTIAGO DE LOS CABALLEROS, RD.- En una atmósfera de dolor y pesadumbre, los restos del arzobispo emérito Juan Antonio Flores Santana, fueron depositados dentro de la cripta de los obispos de la Catedral Santiago Apóstol El Mayor, del Centro Histórico de esta ciudad.
Previamente fue oficiada una misa por el arzobispo Ramón Benito de la Rosa y Carpio. Mientras que en la homilía de cuerpo presente, el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, resaltó las cualidades espirituales y los aportes que a la Iglesia Católica hizo el fenecido.
Rodríguez reseñó que entre tantas obras a las que se dedicó con empeño, está la nueva Catedral de la ciudad de La Vega, que es motivo de orgullo para sus ciudadanos.
En los actos religiosos tuvieron presentes la mayoría de los obispos que integran la Conferencia del Episcopado Dominicano, quienes destacaron la fecunda labor pastoral de Flores Santana.
Otros asistentes fueron la primera dama de la República, Cándida Montilla de Medina, al igual que el expresidente de la República, Hipólito Mejía. También la gobernadora provincial, Aura Toribio y el jurista y dirigente político, Julián Serulle.
La primera dama se definió como una discípula de monseñor Flores Santana. Sostuvo que se debía dar gracias a Dios por su permanencia. Recordó que trabajó junto al sacerdote en la escuela de evangelización Emiliano Tardif.
Mientras que el ex presidente dominicano Hipólito Mejía, calificó a monseñor Flores Santana como un hombre excepcional. De acuerdo al ex mandatario, la hoja de vida fue extraordinaria, pues siempre estuvo apegado a los principios cristianos.
