POR EMILIANO PEREZ ESPINOSA
NEW YORK.- Los dominicanos residentes en el Estado de Nueva York reconocen en la seccional Jaime Vargas del PLD a una de las instituciones dominicanas más rica en recursos humanos, pero también concluyen que ha sido pobremente dirigida y/o administrada en los últimos años, de ahí lo que dice la vox populi: “Si las cosas siguen como van se podría perder una vez más en NY.”
Si revisamos las estadísticas políticas del 1990 al 2012, nos daríamos cuenta de lo que vaticinamos. Por ejemplo, fuimos la organización política que más apoyo concitó en la comunidad criolla en Nueva York, en todos los órdenes, incluyendo en recursos financieros, para las campañas presidenciales en la República Dominicana de los años 90, 94, 96, y del 2000.
Pero, si estudiamos las tres veces que hemos votado en Nueva York, notaremos que del 2004 al 2012, nuestros votos han ido disminuyendo de una manera consistente: de un 73.68% en 2004 a un 58.98% en 2008, y un 43.73% en 2012. Por eso concluimos que para el 2016, podríamos seguir bajando, si no hacemos los CAMBIOS necesarios e imprescindibles que requiere la seccional; independientemente del excelente gobierno que está ejecutando el compañero Lic. Danilo Medina.
¿Qué hacer?, como se preguntó un revolucionario en el siglo XIX. Dentro de los cambios que entendemos necesitamos hacer está, en primer orden, que la Seccional Jaime Vargas pueda celebrar una Conferencia de dirigentes en el marco del VIII Congreso, pero una conferencia de la Seccional, con la Seccional y para la Seccional. En ese evento podríamos diseñar un posible PLD funcional para el Estado de Nueva York para los próximos 10 años. Segundo, los Peledeístas de la Seccional de Nueva York tenemos que iniciar y practicar la consigna de las Naciones Unidas: «Unidad en la diversidad.» y Tercero, es necesario establecer reglas de juego claras y transparentes, incambiables a mitad de los procesos internos.
Si logramos lo antes expuesto, estamos seguros que tendríamos un Happy 2016 en la Seccional Jaime Vargas de Nueva York. De lo contrario, «si las cosas siguen como van, se podría perder una vez más en el 2016 en NY.»
