NUEVA YORK .— Alex Rodríguez fue suspendido hoy hasta fines del 2014 y otros 12 peloteros, todos latinoamericanos, fueron inhabilitados por 50 juegos por las Grandes Ligas, en la tanda de castigos más grande desde la de los «Black Sox» de hace casi un siglo.
Estas sanciones se suman a la suspensión por 65 partidos que recibió Ryan Braun el mes pasado y a las de otros cuatro peloteros que fueron disciplinados por sus relaciones con Biogenesis of America, una clínica especializada en combatir el envejecimiento que fue acusada de distribuir sustancias prohibidas entre deportistas.
El castigo más severo fue para Rodríguez, el pelotero mejor pagado, quien quedó inhabilitado por 211 juegos.
A diferencia de los demás, que aceptaron sus castigos, el pelotero dijo que apelará la sanción.
Las Grandes Ligas dijeron que la suspensión de Rodríguez es más larga por «su uso y posesión de numerosas formas de sustancias estimulantes prohibidas, incluidas testosterona y la hormona del crecimiento humano, a lo largo de varios años».
Además, «intentó encubrir sus violaciones del programa (de lucha contra las drogas) incurriendo en una conducta que buscaba obstaculizar y frustrar la investigación», acotó.
El toletero de los Yankees admitió en el pasado haber usado sustancias prohibidas cuando jugaba con los Vigilantes entre el 2001 y el 2003, pero ha negado haberlas vuelto a usar desde entonces.
«Me siento decepcionado con el castigo y me propongo apelar y pelear esto», manifestó Rodríguez. «Estoy deseoso de salir al terreno de juego con mis compañeros esta noche en Chicago.
Los Yankees tenían programado para esta noche el debut de Rodríguez en esta temporada. El toletero de 38 años, de origen dominicano, viene de una operación en la cadera y en enero sufrió un tirón en el cuádriceps.
Los peloteros suspendidos por 50 juegos, que aceptaron la sanción, son los dominicanos Nelson Cruz (Texas), Jhonny Peralta (Detroit), Fernando Martínez (Yankees), Antonio Bastardo (Filis), Jordany Valdespín, César Puello (ambos de Mets), Fautino De Los Santos (Padres) y Jordan Norberto (agente libre); los venezolanos Francisco Cervelli (Yankees), Jesús Montero (Marineros) y Sergio Escalona (Astros), y el nicaragüense Everh Cabrera (San Diego).
Cruz, Peralta y Cabrera participaron del último Juego de Estrellas.
Este es el peor escándalo en el béisbol desde que varios peloteros de los Medias Blancas de Chicago fueron acusados de ir a menos ante los Rojos de Cincinnati en la serie mundial de 1919. Se alude a esa novena de los White Sox como los Black Sox (Medias Negras).
«Los jugadores que violaron el programa han hecho que la gran mayoría de los peloteros sean vigilados ahora, peloteros que quieren hacer las cosas bien», expresó el comisionado del béisbol Bud Selig. «Seguimos atacando este tema desde todos los frentes: la ciencia y la investigación, la educación y la investigación».
En la primera reacción que se conoce de uno de los involucrados, Peralta difundió un comunicado en el que dijo que «en la primavera del 2012 cometí un error terrible, que lamento profundamente».
Acto seguido afirmó que «defraudé a mucha gente» y ofreció disculpa a sus compañeros y a los aficionados de los Tigres.
La suspensión de Peralta es un golpe duro para Detroit pues estaba bateando de 305 con 11 jonrones y 54 empujadas.
Cruz, por su parte, lidera a los Vigilantes en jonrones y empujadas.
Cruz dijo que sufrió una infección gastrointestinal que no fue bien diagnosticada y perdió 40 libras. Inseguro acerca de su estado físico al presentarse a la pretemporada, «cometí un error de juicio que lamento profundamente y acepto toda la responsabilidad de mi error», expresó en un comunicado.
«Mi enfermedad no es excusa», añadió. «Espero poder recuperar la confianza y el respeto de los Vigilantes, de mis compañeros y de la gran afición de los Vigilantes».
La investigación comenzó cuando el Miami New Times publicó en enero documentos que vinculaban a varios peloteros con Biogenesis.
Rodríguez podría negociar un castigo más corto si renuncia a radicar demandas y a llevar el caso a un árbitro, indicó una persona informada. Si no hay acuerdo, la apelación sería analizada por el árbitro Fredric Horowitz.
Si la apelación fuese rechazada, Rodríguez podría acudir a otras instancias y prolongar la entrada en vigor de la suspensión hasta el 2015.
Rodríguez ha dicho que cree que las grandes ligas y los Yankees quieren impedir que vuelva a jugar.
«Hay más de uno que se beneficia de que yo no vuelve a pisar el terreno de juego. Y no me refiero a mis compañeros ni a los aficionados de los Yankees», declaró Rodríguez el viernes. «Con todo lo que está pasando entre bambalinas y las formas creativas que encuentra la gente para cancelar tu contrato, claro que me preocupo».
A Rodríguez le adeudan $8.5 millones de sus sueldo de $28 millones correspondiente a esta temporada y $86 millones por los últimos cuatro años de su contrato con los Yankees.
Girardi dijo que no cree que el retorno de Rodríguez afecte negativamente al equipo.
«No creo que vaya a crear situaciones incómodas», manifestó. «La mayoría de los muchachos lo conocen, se han reído con él y han pasado mucho tiempo con él. No cambiará nada. Obviamente habrá más periodistas, pero eso es algo de lo que se tendrá que ocupar Alex, no el resto de los peloteros».
Ha habido 43 suspensiones desde que se aprobó un programa de controles en el 2005. La más larga fueron los 100 juegos que debió cumplir el pitcher dominicano de San Francisco Guillermo Mota cuando se le encontraron estimulantes por segunda vez.
Manny Ramírez, también dominicano, se retiró hace dos años, luego de ser suspendido por 100 partidos. Cuando regresó en el 2012, la suspensión fue acortada a 50 juegos.
Una suspensión de 100 juegos del catcher de Colorado Eliézer Alfonso fue anulada por problemas con el manejo que se le dieron a las pruebas de orina.