Por Jhonny Trinidad
Con frecuencia nos lamentamos de que la vida no nos ha dado lo suficiente como para sentirnos felices.
Es cierto que hay gente que lo ha tenido más fácil que otros, pero nacer en una familia adinerada no necesariamente es sinónimo de éxito.
Es cierto que hay gente que lo ha tenido más fácil que otros, pero nacer en una familia adinerada no necesariamente es sinónimo de éxito.
Puede que tengas talento, pero la suerte no puede encontrarte de brazos cruzados en casa, sino como a la mayoría de los triunfadores: trabajado duro y peleando por tu futuro, no importa las dificultades que encuentres en el camino.
Hace poco, conocimos a un joven con múltiples incapacidades locomotoras, pero con una fe y un espíritu de superación dignos de ser imitados y que le han ganado el respeto y admiración de sus vecinos, familiares y amigos.
Nacido hace 14 años en el seno de una familia ensamblada, El Taka Flow es un niño pintoresco, con una propuesta interesante y un talento único para componer e interpretar rap y dembow.
Su lirismo es exquisito y los temas que escribe acumulan méritos suficientes como para hacerse acreedor de los vítores de quienes han presenciado las actividades en que se ha presentado, principalmente en el barrio San Antonio, del sector Los Mina, en Santo Domingo Este, donde se crió y reside.
Evidentemente, El Taka es un cantautor en pleno proceso de adaptación a los nuevos tiempos, que sueña con ser un poeta popular extraordinario, para lo cual cuenta con el respaldo incondicional y desinteresado del regidor Daneris Santana, un filántropo entregado a su comunidad.
Al parecer, el apoyo del edil no es seficiente para el despegue y proyeción del novel artista, quien sueña con lograr el éxito y convertirse en el estandarte de otros niños con impedimento, razón por la que El Taka apela a la bondad de otras personas que puedan ayudarlo en ese propósito.
A pesar de que Joshua Benjamín de la Rosa López (nombre real de El Taka Flow) cuenta con un talento innato, desea y necesita asistir a una escuela de música para profesionalizar su arte, pero sus padres son pobres y lo poco que consiguen lo invierten en comida, pago de alquiler, ropa y la educación de sus hijos.
Obviando esas adversidades, El Taka Flow dice que “he tenido la suerte y bendición de que Dios me ha abierto unas puertas inesperadas para poderme desarrollar”, pero necesita el respaldo de alguien con recursos que lo ayude a pulir su talento. Si eres esa persona, llama al (829) 707-7357 o al (829) 521-6741.