Johnny Ventura tiene la fórmula para seguir en la música

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De las modalidades musicales le complace el respeto que le demuestran muchos intérpretes urbanos, de quien se nombra un fanático más.

Dar y recoger amor ha sido la clave que encontró el Caballo Negro para mantenerse activo y vigente por seis décadas.

Con un repertorio de 106 discos, el veterano merenguero de 79 años promete un concierto sabroso, el 10 de noviembre, en el Choliseo, donde tendrá a El Gran Combo de Puerto Rico y a otros amigos artistas como invitados.

Por Rosalina Marrero-Rodríguez – Primera Hora
 

PUERTO RICO.- No hay dietas ni cremas milagrosas para tener la vitalidad del maestro del merengue dominicano Johnny Ventura. Basta con amar y ser amado para alcanzar los 79 años con la misma imagen que se le veía en los antiguos programas El Show de las 12 o Noche de gala, o en alguna tarima de fiestas patronales, desde el año 1962 hacia acá.

“Amaos los unos a los otros. Pienso que ese debe ser el norte de todo; brindar y recoger amor, eso da mucha felicidad, y cuando hablo de amor no necesariamente estoy hablando de sexo. Amor en el más alto sentido de la palabra, porque sentirse amado es algo fundamental de un ser humano”, declaró esta institución de la música caribeña para justificar la energía y elegancia que le distingue. 

Ventura visitó ayer la Isla por unas horas para promover el concierto que celebrará sus seis décadas de trayectoria, que incluyen 106 grabaciones y decenas de éxitos, como Pitaste, Capullo y sorullo, Oye mi ritmo y Patacón pisao, que se convirtieron en himnos en ciudades de comunidades latina en Estados Unidos, Centro y Sudamérica. 

Con estos y muchos otros clásicos del merengue, el Caballo Negro subirá al escenario del Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot el domingo, 10 de noviembre, con un espectáculo que agitará los cuerpos tanto como las emociones.

“Quiero que la gente disfrute, pero indiscutiblemente vamos a tocar épocas y que la gente por relación con la música que en algún momento significó algo para ellos, pues se van a transportar a ese tiempo”, adelantó sobre la cita que multiplicará la dosis rítmica con El Gran Combo de Puerto Rico, El Conjunto Quisqueya, Milly Quezada y Grupomanía. Como presentador de este festín tropical pudiera estar Eddie Miró, quien tantas veces lo presentó a través de las pantallas del televisor.

Padre de siete hijos (dos varones y cinco mujeres), abuelo de 14 nietos y bisabuelo de tres biznietos, Juan de Dios Ventura Soriano no reconoce una fórmula “extraordinaria” en la fortuna de ser una figura admirada por varias generaciones, más allá de tener la suerte de grabar letras y música cercana a él. 

“Nosotros cultivamos una música que en su momento era el techo musical en el mundo, pero ahí es cuando llega la piratería, cuando llega la tecnología que saca de paso a los disqueros y lleva a la quiebra a muchos de ellos y pienso que ahí alguno de nosotros no asimiló su carrera discográfica y no se empoderó de la misma. Por eso nos quedamos cantando las mismas canciones de antes, y qué bueno que fue así porque le dimos paso a las nuevas generaciones”.

De las modalidades musicales le complace el respeto que le demuestran muchos intérpretes urbanos, de quien se nombra un fanático más.

“Me gusta mucho la música, no discrimino. La música para mí es música. En principio a muchos de ellos les di consejos en cuanto a las letras, porque cuando has tenido un relativo éxito como lo hemos tenido nosotros no debes nadar en el egoísmo porque tú no eres dueño del mundo, entonces darle consejo a la juventud es parte de mi vida, orientarlos en el mejor sentido de la palabra y con ellos no ha habido que hacer mucho, porque ellos han sabido unirse y crear una verdadera industria”.

Todavía le pica la política

Adentrarse en las necesidades sociales de su natal República Dominicana es una obligación incurable para Ventura, quien llegó a ocupar la silla de la Alcaldía de Santo Domingo bajo el Partido Revolucionario Dominicano (PRD). Por ello no descarta entrar de nuevo a la política activa de su país.

“Es un virus difícil de sacar porque son preocupaciones sociales más que políticas, lo que pasa es que para canalizarlas, agraciada o desdichadamente, tiene que ser por intermedio de la política y en países que han adolecido de dictaduras, como el caso de nosotros, alguien tiene que estar ojo visor para que no se permitan los desmadres de las dictaduras”, puntualizó luego de aplaudir la movilización civil de los puertorriqueños contra el gobierno de Ricardo Rosselló el pasado verano.

“Puerto Rico dio una demostración cívica muy importante, no solamente para Puerto Rico sino para el mundo”.